El hombre que quería ser feliz, de Laurent Gounelle

El hombrequequeriaserfelizEl hombre que quería ser feliz.
Laurent Gounelle
Traducción de Álvaro Abella
Maeva (Madrid, 2009)

Bali. El paraíso que no cuenta con una palabra para designar paraíso. Un hombre, Julian, se acerca por azar, por curiosidad hasta un viejo curandero. Una búsqueda que ni siquiera nuestro protagonista reconocía al principio: la felicidad.

El hombre que quería ser feliz, del francés Laurent Gounelle y publicado por Maeva, es una parábola moderna sobre la búsqueda legítima de la felicidad, la necesidad que tenemos todos de aprender qué es la vida, y cómo disfrutarla. El protagonista de esta historia se encuentra en Bali con un hombre sabio, que mezcla el conocimiento ancestral con los de la moderna psicología. Tras una serie de encuentros-desafíos y grandes confesiones Julian camina de la mano de su nuevo maestro hacia una lugar deseado por todos: la felicidad. Aunque no se ofrezca una definición exacta de felicidad, lo que la novela de Gounelle plantea sobre todo es cómo vivir nuestras existencias en positivo.

Las convicciones propias, las expectativas correctas, el placebo como ejemplo de lo que las convicciones mentales pueden ejercer sobre el cuerpo, el valor del dinero, la asertividad, el miedo al no o el papel de la religión, son solo unos pocos de los asuntos que el curandero va poniendo de manifiesto ante un Julian que no había ido a buscar consejos para ser feliz pero que en realidad todo el mundo desea que le ofrezcan. Con poco que hurguemos en nosotros mismos podremos ponernos en la misma situación del protagonista de esta nouvelle.

Se muestra asímismo la belleza de una tierra llena de contrastes, hermosa, que invita a la reflexión y al descanso. De tradiciones milenarias, este paraíso en la tierra es retratado con destreza por el autor y nos contamina con el gusanillo del deseo de conocerlas, sus playas su quietud de siglos y su gente amable, sonriente, con una perspectiva de la vida tan distinta a la nuestra pero tan cercana en sus necesidades básicas en tanto que hombres y mujeres.

Una de las grandes enseñanzas de esta novela es la no dependencia de los demás, sobre todo de aquellos que más parecen influirnos. La búsqueda de los sueños y de la propia felicidad está ligada a la independencia del criterio, a la búsqueda de la propia identidad desligada de la tiranía de la opinión de los demás. Aquí está la clave de esa búsqueda.

Este libro plantea interrogantes, introduce desafíos e invita a pensar en un tema tan importante y que ha sido objeto de grandes estudios y sigue acaparando el interés de todos los hombres y las mujeres de hoy. No hay nadie que en su sano juicio despreciara la posibilidad de comprenderse un poco mejor y avanzar un poco más en ese camino tantas veces sinuoso que es la propia existencia.

Capítulos breves que mantienen cierta tensión durante el relato para que sigamos leyendo, hacen de esta novela un buen compañero de viaje y es una recomendable lectura para este verano que se viene acercando hasta nosotros con su tranquilidad de tardes para pensar y para soñar. Consejos positivos que no nos vienen mal a ninguno aunque estemos dispuestos a discutir algunos de sus planteamientos, El hombre que quería ser feliz puede ser para sus lectores una puerta, un plataforma para comenzar a plantearnos grandes cosas para nuestra existencia. El reto es enterarnos si Julian lo consiguió o no y si su maestro acertó con el diagnostico. Pasen y lean y que sean felices.

Pedro Crenes Castro
http://senderosretorcidos.blogspot.com

Pedro Crenes Castro

Pedro Crenes Castro (Panamá, 1972), es columnista en 'La Prensa' y colaborador en la revista hispanoamericana 'Otro Lunes'. Es autor de los libros “El boxeador catequista”, “Microndo”, "Cómo ser Charles Atlas" y "Crónicas del solar". Actualmente imparte talleres literarios en “Párrafos. Talleres de escritura” en la ciudad de Vigo.

6 Comentarios

  1. Lo estoy leyendo, es asombroso, si a alguien le interesa la psicología o quiere saber más de la vida y de la importancia de las pequeñas cosas y actos, lo recomiendo mucho.

  2. Me interesa muchisimo adquirir el libro . en donde lo puedo comprar. gracias

  3. NO LO PUEDO ENCONTRAR EN LAS LIBRERIAS, YA HE LEIDO EL ULTIMO LIBRO DE GOUNELLE «NO ME IRE SIN DECIRTE A DONDE VOY» Y TAMBIEN LO RECOMIENDO, DE ECHO ESTE HIZO QUE ME NACIERA EL LEER EL PRIMERO PERO NO LO ENCUENTRO….

  4. Yo también lei «No me ire sin decirte adonde voy» y amo el libro, amo a Alan, a Dubreil, amo a Laurent Gounelle .. Es apasionante leer ese libro, lo recomiendo 100%.

  5. El hombre que queria ser felizZ, es un buen libro, lo lei sin dar tregua ajaja, no desenfoca de su idea principal y… eso, es recomendable 🙂 .
    Me pidieron el libro y se lo pidieron…

  6. cuento de dos cafes descafeindos::
    Cuento de dos cafés descafeinados es la conversación de dos chicas en una tarde de café.
    Hablan sobre las relaciones, el amor,
    la sociedad, la dificultad para ser madres,
    la cultura de la imagen, las bodas,
    la relación entre amigas, disney… ¿Quieres saber lo que piensan?Cuento
    de dos cafés descafeinados es una lectura ráp ida y amena escrita a modo de diálogo
    en lenguaje coloquial repleta de situaciones, ejemplos y bromas. Un rato divertido que te hará reflexionar.
    Un trocito de vida hecho palabras.

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