Muerte en verano. Benjamin Black
Traducción de Nuria Barrios
Alfaguara (Madrid, 2012)
La literatura, el texto escrito, es capaz de suscitar, de propiciar innumerables situaciones emocionales que no son, a la larga, sino sentimientos, enseñanzas, propuestas de inteligencia, de libertad o de sueño. La buena literatura comprende, de algún modo, todas las ramas del saber: la arquitectura y la música, la psicologÃa y la medicina, la estética y la religión… La frase de que el escritor (cualquier escritor, no solo el novelista) porta el espejo que recoge la realidad es esencialmente cierta toda vez que ese escritor es un pensador privilegiado, es portador de una percepción reflexiva que ayuda, sin duda, a hacer más fácil y llevadero el camino del vivir, de la tarea diaria. De ahà que se haya dicho tantas veces que literatura es terapia; sobre todo la buena literatura, esto es, las palabras precisas para exponer son sencillez y claridad una idea, un pensamiento.
John Banville (BenjamÃn Black para la novela policÃaca) es considerado con justicia un gran escritor en la medida en que aúna inteligencia y reflexión, claridad y sencillez. Repara en el matiz como pocos (el lector adicto habrá comprobado la alusión reiterada a los matices de la luz en sus obras) y mira la realidad con una lupa que le hace apreciar hasta los mÃnimos detalles.
En la lectura de esta obra, sin embargo, he tenido la sensación de que es un mecánico de taller trabajando con traje y pajarita; algo no habitual, casi impropio. Quiero decir con ello que, en un texto muy brillante se acoge una voluntad de novela policÃaca que no se imbrica a la perfección. Y es que el llamado género negro exige algo más que estilismo. Es algo asà como una variante psicológica, la percepción de una realidad hipotética (basada en una realidad cruda como la existencia del mal) que tiene unas claves especÃficas muy exigentes. P.D.James en su AutobiografÃa o Dorothy Sayers en su prólogo a El almirante flotante lo explican muy bien.
Es decir, como lector me parece más ‘propio’ el Banville de El intocable o Los infinitos que éste Black venido a escritor de novela policÃaca. El caso es que la novela que comentamos resulta muy interesante, correcta, plausible por bien escrita. Sin embargo tengo la sensación, digamos, que el escritor Banville, que cuadra bien en el escenario de un teatro tradicional, aquà el escenario -meticuloso- es como si estuviese montado sobre un carro donde se ve el campo alrededor.
Es una percepción; el lector dirá según su entender.
Ricardo MartÃnez
www.ricardomartinez-conde.es
buena idea gracias c: