La chute de la maison Usher
(Jean Epstein, 1928)
Adaptación del relato homónimo de
Edgar Allan Poe
Guión: Luis Buñuel y Jean Epstein
FotografÃa: George y Jean Lucas
Ayudante de dirección: Luis Buñuel
Vestuario: Oclise
Música: Roland de Cande
Intérpretes: Jean Debucourt, Marguerite Gance, Charles Lamy, Fournez-Goffard, Abel Gance
El relato
Roderick Usher, pintor y poeta excéntrico que vive retirado en una inhóspita mansión junto a su hermana, Madeline, invita a un viejo amigo de la adolescencia, apremiándole a ello debido a encontrarse gravemente enfermo. Al llegar, el invitado es informado por el propio anfitrión de su mal, al parecer congénito, que le produce alucinaciones y supersticiones que, entre otras cosas, le impiden salir de la casa. Madeline, quien también se encuentra enferma, fallece y es depositada en una cripta. No tardarán en suceder fenómenos extraños que provocarán la huida del invitado y un terrible final que destruirá a la familia Usher.
Publicado en la revista Burton’s Gentleman’s Magazine en 1839, este relato está considerado uno de los más importantes de los escritos por Poe. Sus cuarenta y nueve párrafos contienen la esencia literaria del autor, volcando en ellos todas sus virtudes creativas: referencias literarias (incluyendo un poema completo, «El palacio encantado»), ambientación, psicologÃa de personajes, fenómenos paranormales y, por supuesto, elementos autobiográficos. Curiosamente, podrÃa deducirse que la obra refleja la misma crisis que padeció Poe al fallecer su esposa Virginia Clemm, lo que no deja de ser inquietante ya que fue escrita y publicada ocho años antes de la muerte de Virginia.
De La caÃda de la casa Usher se han hecho decenas de adaptaciones para cine y televisión, siendo la más conocida, además de la que ofrecemos, una versión de Roger Corman protagonizada por Vincent Price. También ha servido de base para varias óperas, canciones y piezas de ballet.
Edgar Allan Poe (imagen: W.S. Hartshorn, 1848) El autor
Edgar Allan Poe (Boston, 1809 – Baltimore, 1849). Poeta, cuentista y crÃtico estadounidense. Tras la muerte de sus padres, actores de teatro, fue adoptado por John Allan, un hombre de negocios de Richmond. Ingresó en la Universidad de Virginia pero fue expulsado a causa de su afición al juego y a la bebida. Tras defraudar a su padre adoptivo, abandonando el trabajo que le habÃa proporcionado, se trasladó a Boston y publicó, con seudónimo, su primer libro de poemas. A pesar de las ayudas de John Allan, que llegó incluso a conseguirle un puesto en el Ejército, su incapacidad e indisciplinada actitud no lograron que sentara cabeza. En 1831 llegó el tercer poemario titulado, sencillamente Poemas. Un año más tarde, instalado en Baltimore, se casó con su prima de catorce años Virginia Clemm. Comienza entonces su periplo por diferentes redacciones de revistas en Filadelfia y Nueva York, ciudad en la que el matrimonio acabó residiendo en 1837. Diez años más tarde, tras padecer una grave tuberculosis, falleció su esposa, lo que le llevó a una profunda crisis de la que nunca se recuperarÃa y que acabó con él en 1849 a causa del alcohol (algo que nunca se llegó a confirmar, ya que los informes médicos desaparecieron).
Como escritor, Poe dejó una producción insuperable de cuentos de terror, ciencia-ficción, misterio y sátira, además de poemas, ensayos, crÃticas y una única novela completa, La narración de Arthur Gordon Pym.
![La chute de la maison Usher](http://www.revistadeletras.net/wp-content/uploads//2012/06/La-chute-de-la-maison-Usher1.jpg)
La pelÃcula
El surrealista Jean Epstein es el responsable de esta adaptación, primera de las muchas que se han hecho del relato de Poe. La hizo con la complicidad de un joven Luis Buñuel al cargo de la adaptación del cuento y que también hizo las funciones de auxiliar de dirección, papel que ya desempeñó en el anterior trabajo de Epstein, Mauprat (1926). Sin embargo, ya avanzado el rodaje, durante las tomas de planos exteriores, Epstein despidió al de Calanda por haber insultado a Abel Gance, quien participaba como actor junto a su esposa. Fieles a Poe, los dos cineastas aportan su particular visión de la «pesadilla» en la que vive Roderick Usher haciendo uso del ralentà (técnica poco utilizada hasta entonces) para ofrecer un clima onÃrico, lúgubre y fantasmal en algunas escenas. Los decorados, obra de Pierre Kefer, otorgan un espacio espectral y decadente en el que destacan las cortinas, enormes y en contÃnuo movimiento, como elemento perturbador que hace visibles a las almas que oscilan con el viento y las empujan. Toda la carga dramática queda en manos de los primeros planos de los actores, en especial de Jean Debucourt, quien interpreta a Roderick. Las poderosas imágenes, entre las que destacan el entierro de Madeline o su posterior resurrección, son de una belleza plástica y poética que siguen asombrando a las nuevas generaciones. A pesar de sus deficiencias, se la sigue considerando una de las cimas del cine fantástico francés.
La música de corte medieval que acompaña a la copia de nuestra Filmoteca Literaria pertenece a Roland de Cande y fue añadida en 1960.
José A. Muñoz
[…] Noticia completa (Revista de letras). […]