El 1 de agosto de 2008 Enrique Vila-Matas leyó en la Cátedra Anagrama en Monterrey un texto que, bajo el tÃtulo Alocución en Monterrey, aborda el tema de la metaliteratura. Dice: «Escribimos siempre después de otros. Y a mà no me causa problema recordar frecuentemente esa evidencia. Es más, me gusta hacerlo, porque en mà anida un declarado deseo de no ser nunca únicamente yo mismo, sino también ser descaradamente los otros. Ya en uno de mis primeros libros, Recuerdos inventados, me dediqué a robar o a inventar los recuerdos de los otros para poder tener una personalidad propia».
El pasado abril, en vÃsperas de Sant Jordi, entrevisté a Vila-Matas en +Bernat para hablar de las librerÃas de barrio y de Aire de Dylan. En aquel momento sólo transcribà una parte de la conversación. Meses después, recupero esa charla por una extraña forma de azar que me ha llevado a establecer un mapa de relaciones un tanto ecléctico al que querÃa dar forma. La cita del texto que Vila-Matas leyó en México no es gratuita, ya que en aquella entrevista me habló de la misma después de que le preguntase sobre el tema de la intertextualidad. “El método es coger una cita, transformarla, me lleva a otro sentido. Entonces este sentido a veces me permite continuar la narraciónâ€.
Esa misma mañana le pregunté por Pessoa. SabÃa que era un gran admirador del escritor portugués. “Me entusiasma. Los poemas de Campos, sobre todo, me parecen fascinantes. Porque, además, de pronto, son frases que se deslizan hacia otro lado. Es como si estuviera muy borracho, llegara a su casa e iniciara una frase normal e inmediatamente se fuese hacia algo que jamás nadie habÃa escrito. Tiene un sentido a veces difÃcil de captar a la primera. Luego cobra sentido, porque lo ha inventado élâ€, me dijo con entusiasmo.
Entonces me referà a un poema de Pessoa que comienza con la frase “Viajar! Perder paÃses!â€. “FÃjate que pensaba que no existÃa. Hubo un tiempo en que pensé que era mÃa. Viene de esa duda que a veces se tiene sobre la autorÃa de alguna frases. En todo caso, y si es de alguien, lo es porque lo ha oÃdo antes. Es la historia interminable de dónde salen las palabras, del verbo o de la creaciónâ€. Después comprendà mejor a qué se referÃa sobre su proceso de escritura, tras leer la alocución que dio en México y relacionarlo con Perder TeorÃas. La escritura podrÃa ser entonces “un acta levantada con el propósito exclusivo de escribir y perder paÃses, de viajar y perder teorÃas, perderlas todasâ€.
Al poco tiempo, continuó hablando sobre el proceso de narración y me dijo que “Vilnius, además de ser la capital de Lituania, es lo que me escribÃa Eduardo Lago. Vil por mi apellido y news porque le daba noticias de Barcelona. Pero a partir de ahà tendrÃamos que ir hacia atrás y preguntar por qué me escribo con Eduardo Lago y le doy noticias de Barcelona. Es porque él vive en Nueva York e intercambiamos noticias mutuas. Me llama Vilnews, en inglés, porque forma parte de La Orden de Finnegans y entonces irÃamos a Finnegans wake. Esto forma parte de la narración. Y no es gratuito que ahora hablemos de Finnegans wake porque la narración, en lo que hago yo, se apoya también en las relaciones que tengo con la cultura. Eso se ha criticado en España, pero me parece de catetos. Son como san benitos que se me cuelgan de que cito mucho y tal… todo para mà está relacionado e inmediatamente me relaciono con la cultura. Algunas veces me he preguntado (y no he ido nunca) qué harÃa en el desierto. Allà no hay prácticamente marcas. Las buscarÃa y las encontrarÃa: los bereberes, una señal en la arena, una huella. Todo me conduce a otra cosa. Todo está relacionadoâ€.
“Recuerdo que fui a las Azores con Juan de Segarra. AllÃ, en un bar, Juan me dijo «aquà no hay nada». Y yo le dije «Â¿Cómo que no hay nada?». Sà que tenÃa razón en que habÃa pocas señales, primero de gente, y también de cultura. Pero es infinito, cuando te pones a buscar aparecen las marcas. HabÃa un museo de balleneros… y allà estaba Moby Dick,… Para mà serÃa desesperado que no hubiera nadaâ€, continuó.
Antes de marchar Vila-Matas me recomendó Extraña forma de vida, una obra en que Pessoa le permite hilar una ficción que tiene como centro el espionaje de la realidad. El tÃtulo se debe a un precioso fado de Amália Rodriguez.
Precisamente, dÃas después, Moby Dick y Pessoa se volvieron a entrelazar de manera casual. Consuelo, la librera de Pequod, del barrio de Grà cia, que es una enamorada de Portugal, publicó en el muro de Facebook de la librerÃa dicho fado. La obra de Vila-Matas transcurre en el mismo barrio barcelonés. Y ahora reconstruyo esta extraña forma de conexiones por casualidad también. El pasado 5 de noviembre, Iñigo López Palacios publicó en El PaÃs un artÃculo sobre el cantautor americano Will Oldham en el que analizaba su trayectoria y biografÃa a tenor de un reciente libro de entrevistas.
Will Oldham creó los alter ego de Bonnie Prince Billy y de Palace para hacer música. Lo que me llamó la atención del artÃculo está en el tercer párrafo donde López cita un fragmento de una entrevista sobre la dualidad que Oldham ha establecido con su personajes: «Al leer viejos artÃculos sobre Palace/Bonnie, me acordé de las estrellas de telenovela. La gente se acerca a ellas en un aeropuerto o un restaurante y las reprende por algo que hizo su personaje en la serie, y tienen que dar explicaciones: ‘Ese no soy yo'».
‘Ese no soy yo’ me llevó a Pessoa y a Vila-Matas. Vivir estéticamente en otro. Me habÃan recomendado a Will Oldham en la facultad de filosofÃa y nunca presté mucha atención. Esta vez la llave para entrar en la obra del artista fue la literatura. Me puse a buscar canciones y di, entre incrédulo y sorprendido, con una que parecÃa dar sentido a las extrañas formas de conexión que habÃa establecido: Strange form of life. La canción forma parte del álbum The Letting Go, publicado en 2006. El tÃtulo del disco se debe a un poema de Emily Dickinson:
This is the hour of lead
Remembered if outlived,
As freezing persons recollect the snow,
First chill, then stupor, then the letting go.
Foi por vontade de Deus que eu vivo nesta extraña forma de vida… a strange form of life kicking through windows, rolling on yards. The letting go. Dejar ir paÃses, dejar ir teorÃas. “Ser outro constantemente / Por a alma não ter raÃzes / De viver de ver somente!â€.
Diego Giménez
http://entrefragmentos.wordpress.com
[…] Vila-Matas, Pessoa, Will Oldham, Emily Dickinson y Amália Rodriguez. El artÃculo se puede leer en Revista de Letras. Share this:TwitterFacebookLinkedInGoogle +1ImprimirCorreo electrónicoPinterestMe gusta:Me […]
Interesante, me ha encantado. Lo he publicado en la página de lectores de Vila-Matas en facebook:
https://www.facebook.com/groups/218599325256/
Gracias Elisa!
Gracias a ti, Diego, por el texto!
Termino el texto hablando de E. Dickinson y hoy leà en el blog de Vila-Matas un texto sobre Emily Dickinson y Isabel Núñez… Todo está relacionado si buscamos las marcas 😉
Hablar de «extraña forma de azar» y de Vila-Matas parece que es una y la misma cosa:
http://antoniopriante.wordpress.com/tag/vila-matas/