La obra «Un hombre habla a sus semejantes» recibe el I Premio de Ensayo «España en sus Exilios»

La obra, del escritor ya fallecido Xavier Flores, recoge las ideas y reflexiones del escritor durante su exilio en Francia y Ginebra.

El título premiado recibió una dotación de 6.000 euros y será editado por Luarna Ediciones.

Antonio Quirós entrega el premio a Aitor Flores

Luarna, la primera editorial española 100% digital, hizo entrega ayer del I Premio de Ensayo España en sus Exilios, que recayó en la obra póstuma del escritor Xavier Flores, Un hombre habla a sus semejantes. Diario de un exiliado 1949-1950. Este Premio de Ensayo ha sido creado con el fin de fomentar la reflexión, el estudio y la investigación científica sobre una fuente tan rica, como es la historia de los españoles forzados al exilio.

La obra ganadora, que ha sido dotada con un premio de 6.000 euros y que será editada por Luarna Ediciones, recoge las ideas y reflexiones del escritor durante su exilio en París, Ginebra y diversos pueblos de Francia.

«Es una gran satisfacción que se reconozcan las ideas de mi marido, y su larga lucha por la llegada de la democracia a nuestro país, por lo que estoy profundamente agradecida» , asegura Esperanza Quevedo, esposa del escritor galardonado. «Este Premio que ha organizado Luarna es una gran oportunidad para que se conozca más a fondo la Historia de España y que no se vuelvan a repetir determinados episodios».

Un hombre habla a sus semejantes.

Bajo el subtítulo, «Diario de un exiliado 1949-1950», esta obra recoge las ideas y reflexiones que el autor compartió con otros exiliados de diferentes nacionalidades. En ellas refleja cómo por encima de todas las diferencias de origen, descubrieron la existencia de un nexo común que les hacía relacionarse prácticamente como si fueran familiares simplemente por el hecho de estar lejos de sus países de procedencia.

Además, en este diario el autor expresa ideas que abarcan desde la religión, el sentimiento de crisis total que inundaba a la sociedad en aquellos momentos, hasta su particular visión del  marxismo que según sus propias palabras, «ignora la totalidad del hombre».  En el libro, el autor también realiza un análisis de las personalidades democráticas y totalitarias, así como de los factores que intervienen en su formación.

Un jurado de excepción

El Jurado encargado de fallar del premio, ha estado compuesto por: Rogelio Blanco Martínez, Director General del Libro, Archivos y Bibliotecas en calidad de Presidente del mismo; Santos Juliá Díaz, Catedrático de Historia del Pensamiento Social y Político de la UNED, y Premio Nacional de Historia de España; José Luis Abellán, Doctor en Filosofía, Premio Nacional de Literatura en la modalidad de Ensayo y Presidente del Centro de Estudios sobre el Exilio Español; Nicolás Sánchez-Albornoz, Profesor Emérito de New York University y patrono de la Fundación Claudio Sánchez Albornoz, y Carmen Tagüeña, Doctora en Ciencias Físicas, Presidenta del Ateneo Español de México y heredera del legado de sus padres, exiliados españoles, Carmen Parga y Manuel Tagüeña.

El I Premio de Ensayo, ha sido entregado por Antonio Quirós, consejero delegado de Luarna Ediciones y por José Luis Abellán y Nicolás Sánchez-Albornoz, en representación del Jurado. El galardón fue recogido por Aitor Flores, hijo del escritor, quien agradeció el premio y  sobre la obra de su padre comentó que «se trata de un libro honesto, valioso y culto, con numerosas referencias a renombrados pensadores. En él, España está presente en cada página, desde la pérdida y el amor. Es una obra llena de solidaridad, justicia, respeto y libertad, que refleja las dudas y certezas de un joven de 25 años recién exiliado».

El premio está patrocinado por la Fundación Francisco Largo Caballero, el Ateneo Español de México, la Asociación Andaluza Aljabibe, la Fundación María Zambranoy el Centro de Estudios sobre el Exilio.

Una vida marcada por el exilio

Xavier Andrés Flores nació en 1924 en la ciudad portuaria francesa de Saint-Nazaire, a la que acudieron sus padres de origen gallego, por motivos laborales. Allí recibió una educación con marcados valores republicanos y democráticos que le acompañarían toda su vida.

Por motivos económicos, la familia regresó a La Coruña en 1933. Se acomodaron en un barrio obrero, donde existía un ambiente politizado que llevó a Flores a inclinar sus simpatías políticas hacia la izquierda. Con apenas 17 años, le publicaron su primer artículo, una crítica de arte, en La Voz de Galicia, introduciéndose después poco a poco en los círculos periodísticos de la ciudad.

Tras la guerra civil, Xavier fue considerado por la policía como un «notorio rojo» por lo que en 1948 huyó a Francia, atravesando los Pirineos, junto a su hermano César y otros dos fugitivos. Una vez en París, Flores se sumergió en la atmósfera intelectual de la época, entrando en colaboración con el gobierno republicano en el exilio.

Años más tarde, emprendió estudios universitarios de historia y economía, que le llevaron a investigar estas ramas bajo la dirección de renombrados especialistas. Fue asimismo colaborador en diversas publicaciones y diarios, tanto franceses como españoles (Esprit, Cuadernos del Ruedo Ibérico, El País, El Independiente).

Tras la muerte de Franco, retornó con entusiasmo a la joven democracia española, pero tras la decepción de ver cómo los socialistas en el poder se rodeaban de las nuevas generaciones olvidando a los exiliados, Flores se fue apartando de la vida política paulatinamente. Falleció de manera inesperada en 2008.

Fuente y fotografía: Luarna Ediciones

Revista de Letras

Revista digital de crítica, cultura y pensamiento. Publicación bajo licencia Creative Commons. Desde 2008.

1 Comentario

  1. He conocido personalmente a Xavier Flores y he aprehendido parte de su esencia como hombre liberal de izquierdas. Liberarl en cuanto a la tolerancia hacia los tolerantes y desprecio hacia los intolerantes.

    La vida del ser humano está rodeada de sus circunstancias, positivas y negativas, internas y externas. Entre las externas positivas y en muy buen lugar sitúo mi conocimiento y cambio de impresiones con Xavier.

    Muchos como él mejoraría la sociedad, política, cultural y socialmente.

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